martes, 4 de agosto de 2009

Gone with the Wind

Dicen que a las palabras se las lleva el viento. Pero yo le pido al viento que se lleve mis palabras que dije por impulso y que quiero morirme cuando me doy cuenta que las dije, y no pasa. También le pido al viento que se lleve las palabras que me dijiste y quiero olvidarme de que existieron, y tampoco pasa. Le pido al viento, una y mil veces, pero nunca se lleva las palabras. Ningún tipo de palabras. Ni las buenas ni las malas. Todas quedan. Se que no es culpa del viento, sino de mi boca, que suele parecerse a la de un monologuista, y de mi memoria, que mucho se parece a la de Funes.
Viento: te jode darte una vuelta por casa?

2 comentarios:

  1. ojo con lo que se pide eh...
    a veces viene el viento...uno ni se da cuenta...y se lleva cosas que no queres que se lleve...
    mira lo que le paso a los 3 chanchitos...vino el lobo y su viento y les llevo la casa.
    jajajajaja

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  2. A veces estaría bueno pedirle al viento que lleve las palabras que decimos a oídos de quien queremos que las escuche sin que estemos nosotras ahí, de frente, cara a cara, ojo por ojo, diente por diente...

    o no?

    Viento, si no te llevás, no te lleves, pero si te llevás, llevalas al destino inficado por favor!!

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